Adiós 2020, bienvenido 2021.

¡Feliz 2021 queridos lectores! 

 A diferencia de otras oportunidades esta vez si decidí darme un tiempo para mí, para compartir con amigos y seres queridos, dentro lo que se puede a raíz de la pandemia. El 2020 nos dejó muchos aprendizajes, dejó muchos duelos, corazones rotos, pero también en otros dejó una ilusión o un amor. Algunos empezamos a trabajar en mejorar nuestra versión, en ser un mejor ser humano, el 2020 me regaló muchísimo, desde el 2019 he aprendido demasiado, y agradezco la versión de mí que tengo ahora para brindarle al mundo. 

Sé que no a todos el 2020 nos trajo los mejores momentos, sé que todos vivimos momentos y circunstancias muy distintas, dentro de todo mi proceso, les conté que terminé yendo a terapia para que me ayudarán con algo puntual y de hecho estoy a punto de retomar mis sesiones porque bueno, hay cosas que prefiero que alguien que ha estudiado sobre el comportamiento humano, me ayude a entender y a explicar a alguien más. 

Al 2020 sólo me resta darle las gracias por todo lo aprendido, por todo lo vivido y por ayudarme a crecer.

Este es mi primer post del 2021 y quería aprovechar la oportunidad para hacer un pequeño paréntesis sobre los post normales que manejo en este, nuestro espacio.

A todas aquellas personas que han perdido un ser querido, de corazón les envío un abrazo, sé que el duelo es muy duro, y que tienen y tendrán días grises, y no, no van a olvidar a su ser querido, pero como todo en la vida, es parte del proceso, llegará el momento en que se quedarán en sus corazones con todo lo bueno, con todo lo bonito que esas personas aportaron a su vida y le recordarán con nostalgia, sí, en ocasiones dolerá pero en otras solo recordarán con amor y gratitud por todo lo que les enseñaron y compartieron con ustedes. 

A quienes hemos contado con la fortuna de mantener nuestro empleo, de tener a nuestros familiares y amigos vivos, por favor, no seamos insensibles al sufrimiento ajeno, si tienen la oportunidad de ayudar a alguien, háganlo, no saben cuanta gente está entre la espada y la pared, arriesgando su vida para dar de comer a su familia y pagar deudas, mientras que otros inconscientes nada les importa y se arriesgan y arriesgan a sus familias. Y no, no soy el ejemplo a seguir de nadie, yo también he salido, también me he sentido algo sofocada por el encierro, pero intento cuidarme dentro lo que cabe y si voy a ver a mi familia, cuidarles todo lo que pueda.

Hoy ha sido un día difícil por muchas cosas, entre ellas, por redes sociales llegó a mi el vídeo de un señor que se lanzó del viaducto de Pereira, la verdad para mí fue muy fuerte ver esos vídeos, no tenía idea de lo que pasaba hasta que vi lo peor, en redes se especulan cosas sobre los posibles hechos que ocasionaron que él tomara una decisión así. Muchas personas suelen decir que el suicidio es para cobardes, y no señores, se necesita tener mucha fuerza para tomar una decisión así. Este caso solo me hace pensar en todas las personas que sufren depresión, aquellos quienes han sido discriminados y tratados como tontos, solo por tener esta enfermedad, porque sí, la depresión es una enfermedad. 

El año pasado los invité a ser más empáticos con las personas y sus situaciones, y este año mantengo mi petición, no siempre las personas expresamos lo que sentimos, ustedes no se imaginan las veces que oculte mi tristeza o mis episodios de depresión detrás detrás de una sonrisa. 

Para terminar les cuento que seguiré subiendo post los fines de semana, intentaré que sea los domingos para retomar el ritmo que había logrado el año anterior. cuídense mucho y cuiden a sus familias, por favor. 

Como siempre les digo, gracias por SER y sobre todo por ESTAR. Espero se encuentren muy bien ustedes y sus seres queridos, un fuerte abrazo a distancia.

Con Cariño, 

Eve