No te pertenezco

Por años la idea de pertenecerte estuvo dentro de mí, llegaste a mover todo lo que ningún otro pudo despertar y eso te dio el acceso que nadie más nunca tuvo. hay personas que nos marcan, y tú sin duda fuiste una de esas, fuiste la persona que marcó un antes y un después en mi vida. De ti aprendí cosas que nunca pensé, y de cierta forma me ayudaste a crecer.

Gracias a ti entendí todo lo que no quiero en mi vida. La idea de saberte mi dueño te hizo creer que siempre estaría allí para ti, por sobre todo y sobre todos, siempre me tendrías, una y otra vez, año tras año, día con día, desvelándome en las noches, esperando recibir un mensaje, una llamada, algo que calmara mi sed de ti. 

No me arrepiento de tomar la decisión de alejarme, gracias a todos estos años, a todas las ausencias, a todas las intermitencias, aprendí a conocerme más, y todo esto solo me hizo mas fuerte. Siempre conociste mi talón de Aquiles, bueno, el que solía ser mi debilidad frente a ti; pero los años pasan, los días transcurren, y la cuarentena solo me ayudo a comprender cosas que siempre dejé en el aire, esperando la oportunidad de un mañana juntos.

Lo que por años pensamos que nunca pasaría, solo sucedió, dejé de esperarte, dejé de necesitarte y solo  dejaste de dolerme, ahora eres parte de mi pasado, aquel que he dejado enterrado junto a todo lo demás que me ayudó a convertirme en la mujer que soy hoy, no, ya no soy una niña, no soy más tu juguete, no soy más tu opción, soy mía, MÍA y de nadie más, ya no te pertenezco, no eres mi dueño, no eres nada, no eres nadie en mi vida, solo eres el fantasma de lo que nunca fue, eres la sombra de un ideal, tú no eres real, nunca fuiste nada de lo que creí, de lo que pensé y como muchas cosas en tí, eres solo la idea que creé por más de una década y hoy, hoy puedo decir que el adiós llegó hace tiempo, pero el que volvieras a buscarme, solo debe demostrarte con hechos todo lo que aquí escribo.

Tú no eres y nunca fuiste para mi, no soy tuya, ni tú eres mío, la necesidad de un nosotros nunca fue real, hoy te confirmo que soy libre, aprendí a volar lejos de ti, lejos de tu sed de control, de tu sed de mi, lejos de tu sed de nosotros, y ahora soy yo, tan libre y feliz, aprendí a volar lejos de tus sueños rotos.

Gracias a todos los dedicarme su tiempo, por estar aquí y leerme, gracias por SER y ESTAR.

Con Cariño, 

Eve.